Isaías (BPD) 58

58 1 ¡Grita a voz en cuello, no te contengas,
alza tu voz como una trompeta:
denúnciale a mi pueblo su rebeldía
y sus pecados a la casa de Jacob!
2
Ellos me consultan día tras día
y quieren conocer mis caminos,
como lo haría una naciónque practica la justicia
y no abandona el derecho de su Dios;
reclaman de mí sentencias justas,
les gusta estar cerca de Dios:
3
“¿Por qué ayunamos y tú no lo ves,
nos afligimos y tú no lo reconoces?”.
Porque ustedes, el mismo día en que ayunan,
se ocupan de negocios y maltratan a su servidumbre.
4
Ayunan para entregarse a pleitos y querellas
y para golpear perversamente con el puño.
No ayunen como en esos días,
si quieren hacer oír su voz en las alturas.
5
¿Es este acaso el ayuno que yo amo,
el día en que el hombre se aflige a sí mismo?
Doblar la cabeza como un junco,
tenderse sobre el cilicio y la ceniza:
¿a eso lo llamas ayuno
y día aceptable al Señor?

El ayuno agradable al Señor

6 Este es el ayuno que yo amo
–oráculo del Señor–:
soltar las cadenas injustas,
desatar los lazos del yugo,
dejar en libertad a los oprimidos
y romper todos los yugos;
7
compartir tu pan con el hambriento
y albergar a los pobres sin techo;
cubrir al que veas desnudo
y no despreocuparte de tu propia carne.
8
Entonces despuntará tu luzcomo la aurora
y tu llaga no tardará en cicatrizar;
delante de ti avanzará tu justicia
y detrás de ti irá la gloria del Señor.
9
Entonces llamarás, y el Señor responderá;
pedirás auxilio, y él dirá: “¡Aquí estoy!”.
Si eliminas de ti todos los yugos,
el gesto amenazador y la palabra maligna;
10
si ofreces tu pan al hambriento
y sacias al que vive en la penuria,
tu luz se alzará en las tinieblas
y tu oscuridad será como el mediodía.
11
El Señor te guiará incesantemente,
te saciará en los ardores del desierto
y llenará tus huesos de vigor;
tú serás como un jardín bien regado,
como una vertiente de agua,
cuyas aguas nunca se agotan.
12
Reconstruirás las ruinas antiguas,
restaurarás los cimientos seculares,
y te llamarán “Reparador de brechas”,
“Restaurador de moradas en ruinas”.

La observancia del sábado

13 Si dejas de pisotear el sábado,
de hacer tus negocios en mi día santo;
si llamas al sábado “Delicioso”
y al día santo del Señor “Honorable”;
si lo honras absteniéndote de traficar,
de entregarte a tus negociosy de hablar ociosamente,
14
entonces te deleitarás en el Señor;
yo te haré cabalgarsobre las alturas del país
y te alimentaré con la herenciade tu padre Jacob,
porque ha hablado la boca del Señor.

El pecado, barrera entre Dios y su Pueblo

59 1 No, el Señor no es corto de mano          para salvar
ni duro de oído para escuchar:
2
han sido las culpas de ustedes
las que han puesto una barrera
entre ustedes y su Dios;
sus pecados le han hechocubrirse el rostro
para dejar de escucharlos.
3
Las manos de ustedesestán manchadas de sangre
y sus dedos, de iniquidad;
sus labios dicen mentiras,
sus lenguas murmuran perfidias.
4
Nadie apela con justa razón
ni va a juicio de buena fe;
se pone la confianza en palabras vacías
y se habla con falsedad;
se está grávido de malicia
y se da a luz la iniquidad.
5
Ellos incuban huevos de víboras
y tejen telas de araña;
el que come de esos huevos, muere,
y si se los rompe, salta una culebra.
6
Con sus telas no se hará un vestido
y nadie se cubrirá con lo que hacen.
Sus obras son obras de maldad
y en sus manos no hay más que violencia;
7
sus pies corren hacia el mal,
se apresuran para derramarsangre inocente;
sus planes son planes perversos,
a su paso hay devastación y ruina.
8
No conocen el camino de la paz,
en sus senderos, no existe el derecho.
Abren para sí mismos sendas tortuosas:
el que las recorre, no conoce la paz.

Humilde reconocimiento del pecado

9 Por eso, el derecho está lejos de nosotros
y la justicia, fuera de nuestro alcance.
Esperábamos luz, y sólo hay tinieblas,
claridad, y caminamos a oscuras.
10
Andamos a tientas como los ciegos contra la pared,
andamos a tientas,como el que está sin ojos;
en pleno mediodía tropezamoscomo al anochecer,
en pleno vigor estamos como los muertos.
11
Todos nosotros gruñimos como osos,
gemimos sin cesar como palomas.
Esperábamos el juicio, ¡y nada!,
la salvación, y está lejos de nosotros.
12
Porque son muchas nuestras rebeldíasdelante de ti
y nuestros pecados atestiguan contra nosotros;
sí, nuestras rebeldías nos acompañan
y conocemos bien nuestras iniquidades:
13
fuimos rebeldes y renegamos del Señor,
dimos la espalda a nuestro Dios,
hablamos de oprimir y traicionar,
y urdimos palabras engañosasen el corazón.
14
Así retrocede el derecho
y se mantiene alejada la justicia,
porque la verdad está por el suelo en la plaza
y la rectitud no tiene acceso.
15
La verdad está ausente
y los que se apartan del malson despojados.

La intervención justiciera del Señor

El Señor ha visto con desagrado
que ya no existe el derecho.
16 Él vio que no había nadie,
se sorprendió de que nadie interviniera.
Entonces su brazo lo socorrió
y su justicia lo sostuvo.
17
Él se puso la justicia por coraza
y sobre su cabeza, el casco de la salvación;
se vistió con la ropa de la venganza
y se envolvió con el manto del celo.
18
Conforme a las obras,será la retribución:
furor para sus adversarios,represalia para sus enemigos.
19
Desde el Occidente, se temerá el nombre del Señor,
y desde el Oriente, se respetará su gloria,
porque él vendrá como un río encajonado,
impulsado por el soplo del Señor.
20
Él vendrá como redentor para Sión
y para los hijos de Jacobconvertidos de su rebeldía
–oráculo del Señor–.

Oráculo de Salvación

21 Por mi parte, dice el Señor, esta es mi alianza con ellos: mi espíritu que está sobre ti y mis palabras que yo he puesto en tu boca, no se apartarán de tu boca, ni de la boca de tus descendientes, ni de los descendientes de tus descendientes, desde ahora y para siempre, dice el Señor.

La gloria de la nueva Jerusalén

60 1 ¡Levántate, resplandece, porque llega tu luz
y la gloria del Señor brilla sobre ti!
2
Porque las tinieblas cubren la tierra
y una densa oscuridad, a las naciones,
pero sobre ti brillará el Señor
y su gloria aparecerá sobre ti.
3
Las naciones caminarán a tu luz
y los reyes, al esplendor de tu aurora.
4
Mira a tu alrededor y observa:
todos se han reunido y vienen hacia ti;
tus hijos llegan desde lejos
y tus hijas son llevadas en brazos.
5
Al ver esto, estarás radiante,
palpitará y se ensanchará tu corazón,
porque se volcarán sobre tilos tesoros del mar
y las riquezas de las nacionesllegarán hasta ti.
6
Te cubrirá una multitud de camellos,
de dromedarios de Madián y de Efá.
Todos ellos vendrán desde Sabá,
trayendo oro e incienso,
y pregonarán las alabanzas del Señor.
7
En ti se congregarán todos los rebañosde Quedar,
los carneros de Nebaiotestarán a tu servicio:
subirán como ofrenda aceptablesobre mi altar
y yo glorificaré mi Casa gloriosa.
8
¿Quiénes son esos que vuelan como una nube,
como palomas a su palomar?
9
Son barcos que se reúnen para mí,
con naves de Tarsis al frente,
para traer a tus hijos de lejos,
y con ellos su oro y su plata,
por el nombre del Señor, tu Dios,
y por el Santo de Israel,que así te glorifica.
10
Gente extranjera reconstruirá tus murallas
y sus reyes te servirán,
porque yo te castigué en mi irritación,
pero en mi benevolenciatengo piedad de ti.
11
Tus puertas estarán siempre abiertas,
no se cerrarán ni de día ni de noche,
para que te traigan las riquezas de las naciones,
bajo la guía de sus reyes.
12
Porque la nación y el reinoque no te sirvan, perecerán,
y las naciones serán exterminadas.
13
Hasta ti llegará la gloria del Líbano,
con el ciprés, el olmo y el abeto,
para glorificar el lugar de mi Santuario,
para honrar el lugardonde se posan mis pies.
14
Los hijos de tus opresoresirán a inclinarse ante ti,
y todos los que te despreciaban
se postrarán ante la planta de tus pies
y te llamarán: “Ciudad del Señor”,
“Sión del Santo de Israel”.
15
Antes estuviste abandonada,
aborrecida y despoblada,
pero yo haré de ti el orgullo de los siglos,
la alegría de todas las generaciones.
16
Mamarás la leche de las naciones,
mamarás del pecho de los reyes,
y sabrás que yo, el Señor, soy tu salvador,
y que tu redentor es el Fuerte de Jacob.
17
Haré llegar oro en lugar de bronce
y plata en lugar de hierro;
bronce en lugar de madera
y hierro en lugar de piedra.
Por magistrados te daré la Paz
y por gobernantes, la Justicia.
18
Ya no se oirá hablar de violencia en tu país
ni de expoliación y desastreen tus fronteras;
a tus murallas las llamarás “Salvación”
y a tus puertas, “Alabanza”.
19
El sol ya no será tu luz durante el día,
ni la claridad de la lunate alumbrará de noche:
el Señor será para ti una luz eterna
y tu Dios será tu esplendor.
20
Tu sol no se pondrá nunca más
y tu luna no desaparecerá,
porque el Señor será para ti una luz eterna
y se habrán cumplido los días de tu duelo.
21
En tu pueblo, todos serán justos
y poseerán la tierra para siempre:
serán un retoño de mis plantaciones,
obra de mis manos,para manifestar mi gloria.
22
El más pequeño se convertirá en un millar,
el menor, en una nación poderosa.
Yo, el Señor, lo haré rápidamente, a su tiempo.

La misión del profeta

61 1 El espíritu del Señor está sobre mí,porque el Señor me ha ungido.
Él me envió a llevar la buena noticia a los pobres,
a vendar los corazones heridos,
a proclamar la liberación a los cautivos
y la libertad a los prisioneros,
2
a proclamar un año de gracia del Señor,
un día de venganza para nuestro Dios;
a consolar a todos los que están de duelo,
3
a cambiar su ceniza por una corona,
su ropa de luto por el óleo de la alegría,
y su abatimiento por un canto de alabanza.
Ellos serán llamados “Encinas de justicia”,
“Plantación del Señor, para su gloria”.
4
Ellos reconstruirán las ruinas antiguas,
restaurarán los escombros del pasado,
renovarán las ciudades en ruinas,
los escombros de muchas generaciones.
5
Se presentarán extranjerospara apacentar sus rebaños,
hijos de forasteros serán sus labradores y viñadores.
6
Y ustedes serán llamados“Sacerdotes del Señor”,
se les dirá “Ministros de nuestro Dios”.
Se alimentarán con las riquezas de las naciones,
se enorgullecerán con su magnificencia.
7
Ya que su ignominia fue el doble de la cuenta
y recibieron como parte vergüenza e insultos,
ellos poseerán el doble en su tierra
y gozarán de una alegría eterna.
8
Porque yo, el Señor, amo el derecho
y odio lo que se arrebata injustamente;
les retribuiré con fidelidad
y estableceré en favor de ellosuna alianza eterna.
9
Su descendencia será conocida entre las naciones,
y sus vástagos, en medio de los pueblos:
todos los que los vean, reconocerán
que son la estirpe bendecida por el Señor.

La alegría de Sión

10 Yo desbordo de alegría en el Señor,
mi alma se regocija en mi Dios.
Porque él me vistió con las vestiduras de la salvación
y me envolvió con el manto de la justicia,
como un esposo que se ajusta la diadema
y como una esposa que se adorna con sus joyas.
11
Porque así como la tierra da sus brotes
y un jardín hace germinar lo sembrado,
así el Señor hará germinar la justiciay la alabanza
ante todas las naciones.

La nueva Jerusalén

62 1 Por amor a Sión no me callaré,por amor a Jerusalénno descansaré,
hasta que irrumpa su justiciacomo una luz radiante
y su salvación,como una antorcha encendida.
2
Las naciones contemplarán tu justicia
y todos los reyes verán tu gloria;
y tú serás llamada con un nombre nuevo,
puesto por la boca del Señor.
3
Serás una espléndida coronaen la mano del Señor,
una diadema real en las palmas de tu Dios.
4
No te dirán más “¡Abandonada!”,  ni dirán más a tu tierra “¡Devastada!”,
sino que te llamarán “Mi deleite”,
y a tu tierra “Desposada”.
Porque el Señor pone en ti su deleite
y tu tierra tendrá un esposo.
5
Como un joven se casa con una virgen,
así te desposará el que te reconstruye;
y como la esposa es la alegría de su esposo,
así serás tú la alegría de tu Dios.
6
Sobre tus murallas, Jerusalén,
yo he apostado centinelas:
que nunca se queden callados,
ni de día ni de noche.
Ustedes, los que hacen que el Señorse acuerde,
no se tomen descanso,
7
ni lo dejen descansar a él
hasta que restablezca a Jerusalén
y la convierta en motivo de alabanzasobre la tierra.
8
El Señor lo juró por su mano derecha
y por su brazo poderoso:
“Nunca más daré tu trigo
como alimento a tus enemigos,
ni los extranjeros beberán el vino nuevo
por el que tú has trabajado.
9
Los que lo cosechen lo comerán,
y alabarán al Señor;
los que lo vendimien lo beberán
en mis atrios sagrados”.
10
¡Pasen, pasen por las puertas,
preparen el camino del pueblo,
terraplenen el sendero,
límpienlo de piedras,
levanten un estandarte ante los pueblos!
11
Esto es lo que el Señor hace oír
hasta el extremo de la tierra:
“Digan a la hija de Sión:
Ahí llega tu Salvador;
el premio de su victoria lo acompaña
y su recompensa lo precede.
12
A ellos se los llamará ‘Pueblo santo’,
‘Redimidos por el Señor’;
y a ti te llamarán ‘Buscada’,
‘Ciudad no abandonada’”.

La victoria del Señor sobre Edóm

63 1 ¿Quién es ese que llega          desde Edóm,
desde Bosrá, con las ropas enrojecidas?
¿Quién es ese, ataviado espléndidamente,
que se yergue con la plenitud de su poder?
–Soy yo, el que habla con justicia,
yo, el poderoso para salvar.
2
–¿Por qué están rojas tus vestiduras,
y tu ropa como la del que pisa el lagar?
3
–En la cuba he pisado yo solo,
nadie de entre los pueblosestaba conmigo.
Los he pisoteado con ira,
los he estrujado con furor;
su sangre salpicó mi ropa
y manché todas mis vestiduras.
4
Porque tenía previsto un día de venganza
y había llegado mi año de redención.
5
Miré, y no había quien me socorriera;
me sorprendí de que nadie me sostuviera.
Entonces me socorrió mi brazo
y mi furor me sostuvo.
6
Pisoteé a los pueblos en mi ira,
los embriagué en mi furor,
hice correr su sangre hasta el suelo.

Salmo: evocación de la misericordia de Dios hacia su Pueblo

7 Recordaré los favores del Señor,
alabaré sus proezas,
por todo el bien que él nos hizo
en su gran bondad hacia la familia de Israel,
y por todo el bien que nos hizoen su compasión
y en la abundancia de su misericordia.
8
Él dijo: “Realmente son mi Pueblo,
son hijos que no decepcionarán”.
Y él fue para ellos un salvador
9
en todas sus angustias.
No intervino ni un emisario ni un mensajero:
él mismo, en persona, los salvó;
por su amor y su clemencia,
él mismo los redimió;
los levantó y los llevó
en todos los tiempos pasados.
10
Pero ellos se rebelaron
y afligieron su santo espíritu.
Entonces él se volvió su enemigo
y combatió contra ellos.
11
Ellos se acordaron de los días del pasado,
de Moisés, su servidor:
¿Dónde está el que hizo subir de las aguas
al pastor de su rebaño?
¿Dónde está el que puso dentro de él su santo espíritu,
12
el que hizo marchar su brazo glorioso
a la derecha de Moisés,
el que separó las aguas delante de ellos,
para ganarse un renombre eterno?
13
¿Dónde está el que los condujopor el fondo del Océano,
como a un caballo por el desierto,
sin que ellos tropezaran?
14
Como a ganado que desciende al valle,
el espíritu del Señor les dio un descanso.
¡Así guiaste a tu Pueblo
para hacerte un Nombre glorioso!

Invocación del Pueblo al Dios salvador

15 Mira desde el cielo y contempla,
desde tu santo y glorioso dominio.
¿Dónde están tus celos y tu valor,
tu ternura entrañable y tu compasión?
¡No, no permanezcas insensible!
16
Porque tú eres nuestro padre,
porque Abraham no nos conoce
ni Israel se acuerda de nosotros.
¡Tú, Señor, eres nuestro padre,
“nuestro Redentor” es tu Nombre desde siempre!
17
¿Por qué, Señor, nos desvías de tus caminos
y endureces nuestros corazonespara que dejen de temerte?
¡Vuelve, por amor a tus servidores
y a las tribus de tu herencia!
18
¿Por qué los impíos hollaron tu Lugar santo
y nuestros adversarios pisotearon tu Santuario?
19
¡Desde hace mucho tiempo,tú no nos gobiernas,
y ya no somos llamados por tu Nombre!
¡Si rasgaras el cielo y descendieras,
las montañas se disolverían delante de ti,
64 1 como el fuego enciende           un matorral,
como el fuego hace hervir el agua!
Así manifestarías tu Nombrea tus adversarios
y las naciones temblarían ante ti.
2
Cuando hiciste portentos inesperados,
3
que nadie había escuchado jamás,
ningún oído oyó, ningún ojo vio
a otro Dios, fuera de ti,que hiciera tales cosas
por los que esperan en él.
4
Tú vas al encuentro de los que practican la justicia
y se acuerdan de tus caminos.

Confesión de los pecados y súplica

Tú estás irritado,y nosotros hemos pecado,
desde siempre fuimos rebeldes contra ti.
5 Nos hemos convertidoen una cosa impura,
toda nuestra justiciaes como un trapo sucio.
Nos hemos marchitado como el follaje
y nuestras culpas nos arrastran como el viento.
6
No hay nadie que invoque tu Nombre,
nadie que despierte para aferrarse a ti,
porque tú nos ocultaste tu rostro
y nos pusiste a merced de nuestras culpas.
7
Pero tú, Señor, eres nuestro padre,
nosotros somos la arcilla,y tu, nuestro alfarero:
¡todos somos la obra de tus manos!
8
No te irrites, Señor, hasta el exceso,
no te acuerdes para siempre de las culpas.
¡Mira que todos nosotros somos tu Pueblo!
9
Tus santas ciudadeshan quedado desiertas:
Sión se ha convertido en un desierto,
Jerusalén, en una desolación.
10
Nuestra Casa santa y gloriosa,
donde te alababan nuestros padres,
ha sido presa de las llamas,
y todo lo que teníamos de precioso
se ha convertido en una ruina.
11
Ante esto, ¿vas a permanecer insensible, Señor?
¿Te quedarás calladoy nos afligirás hasta el fin?

Reprobación del culto ilícito

65 1 Yo me dejé consultar                por los que no me interrogaban;
salí al encuentrode los que no me buscaban.
Yo dije: “¡Aquí estoy, aquí estoy!”
a una nación que no invocaba mi Nombre.
2
Tendí mis manos incesantemente
hacia un pueblo rebelde,
que va por un mal camino,
tras sus propios designios.
3
Es un pueblo que no cesade provocarme
en mi propia cara,
sacrificando en los jardines
y quemando incienso sobre ladrillos.
4
Ellos se sientan en los sepulcros
y pasan la noche en las grutas,
comen carne de cerdo
y hay en sus platos un caldo inmundo.
5
Ellos dicen: “Apártate, no te me acerques,
porque te dejaría consagrado”.
¡Esas cosas son una humareda en mis narices,
un fuego que arde todo el día!
6
Pero todo eso está escrito ante mí,
y no me quedaré callado,
sino que les daré su merecido
y se lo pondré en su propio pecho,
7
por sus culpas y las culpas de sus padres,
por todas juntas, dice el Señor.
Porque ellos quemaron inciensoen las montañas
y me ultrajaron sobre las colinas,
yo les mediré su retribución
y la pondré en su propio pecho.

La suerte de los buenos y de los malos

8 Así habla el Señor:
Cuando se encuentra jugo en un racimo,
se dice: “No lo destruyas,
porque hay una bendición en él”.
Yo obraré así a causa de mis servidores,
a fin de no destruirlo todo:
9
haré salir de Jacob una descendencia
y de Judá, a un poseedor de mis montañas;
mis elegidos las poseerán
y mis servidores habitarán allí.
10
El Sarón será un redil de ovejas
y el valle de Acor un corral de vacas,
para mi Pueblo que me habrá buscado.
11
Pero ustedes, los que han abandonado al Señor
y se han olvidado de mi santa Montaña,
los que preparan una mesa para la Fortuna
y llenan una copa para el Destino,
12
a ustedes, los destinaré a la espada
y doblarán la rodilla para el degüello.
Porque yo llamé, y no respondieron,
hablé, y no escucharon;
ustedes hicieron lo que me desagrada
y eligieron lo que yo no quiero.
13
Por eso, así habla el Señor:
¡Mis servidores comerán
y ustedes estarán hambrientos!
¡Mis servidores beberán
y ustedes estarán sedientos!
¡Mis servidores se alegrarán
y ustedes quedarán avergonzados!
14
¡Mis servidores cantarán con júbiloen el corazón
y ustedes gritarán con el corazón dolorido,
gemirán con el espíritu desgarrado!
15
Ustedes dejarán su nombrea mis elegidos
para una imprecación: “¡Así te haga morir el Señor!”.
A mis servidores, en cambio,
se los llamará con otro nombre.
16
Todo el que se bendiga en el país
se bendecirá por el Dios del Amén,
y todo el que jure en el país
jurará por el Dios del Amén,
porque las angustias pasadashabrán sido olvidadas
y estarán ocultas a mis ojos.

El nuevo cielo y la nueva tierra

17 Sí, yo voy a crear
un cielo nuevo y una tierra nueva.
No quedará el recuerdo del pasado
ni se lo traerá a la memoria,
18
sino que se regocijarán y se alegrarán para siempre
por lo que yo voy a crear:
porque voy a crear a Jerusalén para la alegría
y a su pueblo para el gozo.
19
Jerusalén será mi alegría,
yo estaré gozoso a causa de mi pueblo,
y nunca más se escucharán en ella
ni llantos ni alaridos.
20
Ya no habrá allí niñosque vivan pocos días
ni ancianos que no completen sus años,
porque el más jovenmorirá a los cien años
y al que no llegue a esa edadse lo tendrá por maldito.
21
Edificarán casas y las habitarán,
plantarán viñas y comerán sus frutos:
22
no edificarán para que habite otro
ni plantarán para que coma un extraño,
porque mi pueblo vivirá tanto como los árboles
y mis elegidos disfrutaránde la obra de sus manos.
23
Ellos no se fatigarán en vano
ni tendrán hijos para un fin desastroso,
porque serán la estirpe de los bendecidos por el Señor,
ellos y sus vástagos junto con ellos.
24
Antes que llamen, yo les responderé;
estarán hablando,y ya los habré escuchado.
25
El lobo y el cordero pacerán juntos,
el león comerá paja como el buey
y la serpiente se alimentará de polvo:
No se hará daño ni estragos
en toda mi Montaña santa,
dice el Señor.

El culto agradable al Señor

66 1 Así habla el Señor: El cielo es mi trono
y la tierra, el estrado de mis pies.
¿Qué casa podrán edificarme ustedes
y dónde estará el lugar de mi reposo?
2
Todo esto lo hizo mi mano
y todo me pertenece–oráculo del Señor–.
Aquel hacia quien vuelvo la mirada
es el pobre, de espíritu acongojado,
que se estremece ante mis palabras.

Contra la degeneración del culto

3 Se inmola un buey,
    y se mata a un hombre,
se sacrifica un cordero,
    y se desnuca un perro,
se presenta una oblación,
    y se ofrece sangre de cerdo,
se quema un memorial de incienso,
    y se bendice una iniquidad.
Porque ellos han elegidosus propios caminos
y se complacen en sus ídolos,
4
también yo elegiré sus desgracias
y les enviaré lo que más temen.
Yo llamé, y nadie respondió,
hablé, y ellos no escucharon,
sino que hicieron lo que me desagrada
y eligieron lo que yo no quiero.

La llegada imprevista de la salvación

5 ¡Escuchen la palabra del Señor,
ustedes que se estremecen ante su palabra!
Dicen sus hermanos,los que tienen odio contra ustedes
y los rechazan a causa de mi Nombre:
“Que el Señor manifieste su gloria,
así veremos la alegría de ustedes”.
Pero son ellos los que se avergonzarán.
6
Una voz retumba desde la ciudad,
una voz sale del Templo:
es la voz del Señorque retribuye a sus enemigos.
7
Antes de las contracciones, ella dio a luz;
antes de que le llegaran los dolores,
dio a luz un hijo varón.
8
¿Quién oyó jamás algo semejante,
quién ha visto una cosa igual?
¿Se da a luz un país en un solo día?
¿Se hace nacer una naciónde una sola vez?
Pero Sión, apenas sintió los dolores,
ha dado a luz a sus hijos.
9
¿Acaso yo abriré la matriz
y no haré dar a luz?, dice el Señor.
¿Acaso la voy a cerrar,
yo que hago nacer?, dice tu Dios.

La felicidad de Israel y el castigo de sus enemigos

10 ¡Alégrense con Jerusalén
y regocíjense a causa de ella,
todos los que la aman!
¡Compartan su mismo gozo
los que estaban de duelo por ella,
11
para ser amamantados y saciarse
en sus pechos consoladores,
para gustar las delicias
de sus senos gloriosos!
12
Porque así habla el Señor:
Yo haré correr hacia ella
la paz como un río,
y la riqueza de las naciones
como un torrente que se desborda.
Sus niños de pechoserán llevados en brazos
y acariciados sobre las rodillas.
13
Como un hombre es consoladopor su madre,
así yo los consolaré a ustedes,
y ustedes serán consolados en Jerusalén.
14
Al ver esto, se llenarán de gozo
y sus huesos florecerán como la hierba.
La mano del Señor se manifestará a sus servidores,
y a sus enemigos, su indignación.
15
Porque ya viene el Señoren medio del fuego
–sus carros son como un torbellino–
para descargar su ira con furor
y sus amenazas con las llamas del fuego.
16
Porque el Señor entra en juiciocon todos los vivientes
por el fuego y por su espada,
y serán numerosas las víctimas del Señor.

Contra los ritos paganos

17 Los que se santifican y se purifican
para entrar en los jardines,
detrás de uno que va en el medio;
los que comen carne de cerdo,
animales inmundos y ratas,
serán aniquilados todos juntos
–oráculo del Señor–
con sus obras y sus pensamientos.

La ofrenda de todas las naciones

18 Entonces, yo mismo vendré a reunir a todas las naciones y a todas las lenguas, y ellas vendrán y verán mi gloria. 19 Yo les daré una señal, y a algunos de sus sobrevivientes los enviaré a las naciones: a Tarsis, Put, Lud, Mésec, Ros, Tubal y Javán, a las costas lejanas que no han oído hablar de mí ni han visto mi gloria. Y ellos anunciarán mi gloria a las naciones.
20
Ellos traerán a todos los hermanos de ustedes, como una ofrenda al Señor, hasta mi Montaña santa de Jerusalén. Los traerán en caballos, carros y literas, a lomo de mulas y en dromedarios –dice el Señor– como los israelitas llevan la ofrenda a la Casa del Señor en un recipiente puro. 21 Y también de entre ellos tomaré sacerdotes y levitas, dice el Señor. 22 Porque así como permanecen delante de mí el cielo nuevo y la tierra nueva que yo haré –oráculo del Señor–, así permanecerán la raza y el nombre de ustedes.
23
De luna nueva en luna nueva, y de sábado en sábado, todos vendrán a postrarse delante de mí, dice el Señor. 24 Y al salir, se verán los despojos de los hombres que se han rebelado contra mí, porque
su gusano no morirá,
su fuego no se extinguirá
y serán algo horriblepara todos los vivientes.



Isaías (BPD) 58