
El cordero de Isaías-Caldeón de la Barca - Pedro Calderón de la Barca
PITONISA Ya llegas tarde;
pues en Etiopia su esplendor se siente, y si no, vuelve, y mira aquella fuente
donde Filipo en agua peregrina 2020
la primer ara elige cristalina,
(Mirando adentro.)
dando a Behomud la seña de que se halla con esa nueva ley.
DEMONIO ¡Qué miro! Calla;
que ese asombro, ese agravio ahoga el pecho.
PITONISA ¡A mí me anuda el labio! 2025
DEMONIO Y no solo el volcán, en que me quemo temo; pero otra ira.
PITONISA También temo yo mayor mal.
LOS DOS ¿Pues qué mayor sería? DEMONIO Si en mi dolor...
PITONISA Si en la desdicha mía...
LOS DOS Hubiese quien juntando los procesos 2030
de nuestras culpas diga.
(Sale el ÁNGEL.)
ÁNGEL ¡Venid presos!
DEMONIO ¡Qué espanto! ¡Qué ansia! ¡Qué susto!
PITONISA ¡Qué temor! ¡Qué mal! ¡Qué miedo!
LOS DOS ¿Quién eres tú, que a nosotros nos prendes?
ÁNGEL Quien puede hacerlo; 2035
pues ministro de la fe
soy, de los que en el secreto alcázar suyo he gozado
los hidalgos nobles fueros
de familiar suyo, en fe 2040
de que las pruebas me hicieron y que mi pecho ilustró
este blasón blanco y negro, y siendo su santo oficio
hacer inquisición...; pero 2045
venid, que no es necesario
deciros más.
LOS DOS Pues el nuestro
¿qué delito es que te obligue a tal demonstración?
ÁNGEL Eso de que se sepa la causa 2050
no es de aquí, pues para ello tiene la fe tribunales;
ved en el corazón vuestro si sois culpados, que en él
podéis mejor responderos 2055
que yo; pues solo me toca llevaros.
LOS DOS ¡Ya no hay aliento para resistir!
DEMONIO Pues débil el valor...
PITONISA Flaco el esfuerzo...
DEMONIO Solo sabe...
PITONISA Acierta solo... 2060
LOS DOS A mostrar su desaliento.
ÁNGEL Venid, infelices, donde otros de mis compañeros
semejantes delincuentes
tienen ya juntos, a efecto 2065
que en mayor teatro vea el orbe el mayor trofeo que ha descubierto jamás de la fe el cándido velo,
por quien ya en anticipada 2070
gloria entonan los acentos.
MÚSICA (Dentro.)
Venid, mortales, venid, al triunfo mayor,
al aplauso más nuevo
que gloriosa la fe ha conseguido 2075
corriendo los días, volando los tiempos. Venid, venid a mi acento.
DEMONIO ¿Esto más? ¿Hay tal coraje?
PITONISA ¿Esto más?¿Hay tal tormento? 2080
ÁNGEL Venid, pues, que se apresura tal gloria, y sea repitiendo.
DEMONIO Pues aunque diga la voz.
(Aparte.)
PITONISA Pues aunque repita el eco.
(Aparte.)
DEMONIO Tal cláusula...
PITONISA Tan cruel canto... 2085
LOS DOS No he de decir yo con ellos. MÚSICA (Dentro.)
Venid, mortales, venid, al triunfo mayor,
al aplauso más nuevo
que gloriosa la fe ha conseguido 2090
corriendo los días, volando los tiempos. Venid, venid a mi acento.
(Vanse, y sale BEHOMUD, y FILIPO.)
BEHOMUD Apenas, ministro grande
de Dios, lavado me veo 2095
de tantas culpas, y ya en el rebaño supremo
de Cristo, cuando esas voces, con armonioso festejo,
mi dicha aplauden.
(Sale el CUIDADO.)
(CUIDADO) Señor, 2100
dame albricias, pues habiendo
Candaces sabido que venías, no permitiendo su alborozo que llegaras,
aquí te sale al encuentro 2105
con todo el real aparato de su Corte.
BEHOMUD Vamos presto a recibirla.
FILIPO Aunque más los pasos apresuremos,
será en vano, pues se escuchan 2110
ya militares acentos, ya métricas armonías,
que en varios distintos ecos repiten.
(Las chirimías, y dentro MÚSICA, y VOCES.)
MÚSICA y (Dentro.)
VOCES ¡Viva Candaces,
que en el etiópico imperio 2115
admite la ley de gracia
de quien símbolo el cordero fue, que el gran Behomud llevó de Jerusalén al templo!
¡Vivan, vivan entrambos 2120
siglos eternos!
(Salen CANDACES, y acompañamiento.)
BEHOMUD A tus plantas...
CANDACES A mis brazos dirás mejor.
BEHOMUD Feliz llego, y tan feliz, que no solo
con la nueva gracia vuelvo 2125
de nueva ley, que pasando a sacrificio incruento
de cruento sacrificio, habiendo sido el postrero
de la antigua ley el propio 2130
de quien símbolo el cordero que llevé a Jerusalén,
fue, en que testigo presento este venerable anciano...
no solo (a repetir vuelvo) 2135
tan felice soy, que en todo tan mejorado me ofrezco
a tus pies, sino en saber
como en aquel propio tiempo
que lograba yo la dicha 2140
la lograbas tú y tu reino.
CANDACES Justamente el feliz nombre la das de dicha,
si advierto, no sin arrimo de grande
autorizado proverbio, 2145
el que es la fe la mayor felicidad de los reinos.
BEHOMUD Pues sabrás...
CANDACES Nada me digas, pues en las sombras de un sueño
lo que a ti en Jerusalén 2150
te sucedió me dijeron.
Bien instruida, Behomud, tan firme en la fe me veo,
y ella en mí tan bien hallada,
que en señal de dos afectos 2155
tan recíprocos, que haya
hoy en mi corte he dispuesto un acto general, donde
yo de mi parte, poniendo
la protección, la justicia 2160
y piedad ella, estoy viendo
(a pesar de las tupidas
sombras que cubren el tiempo)
la propia imagen de otro,
que en un católico reino 2165
un católico monarca,
segunda luz de los cielos,
ha de celebrar en una ocasión dicen...
(Pasa el ÁNGEL cantando, por el tablado.)
ÁNGEL (Canta.)
Silencio, silencio;
oíd el pregón; silencio, silencio. 2170
Sepan todos cuantos viven debajo del grande imperio a quien saludan del sol
los orientales gorjeos,
cómo la fe de la nueva 2175
ley de gracia ha dispuesto celebrar público auto
en la corte de su reino para que en general juicio
parezcan todos los reos; 2180
y mándalo pregonar
para más notorio hacerlo;
silencio, silencio.
(Vase.)
CANDACES Felice el reino que goza
tan heroico privilegio 2185
como el de mirar que usando de los primitivos fueros,
que alegóricos asumptos, y místicos argumentos
tienen de hacer que apresure 2190
sus brevedades el tiempo,
pasando aquel que hubo entre ser efectuado y propuesto;
y pues la fe -en triunfal carro
(Mirando hacia dentro.)
se ve, sembrando luceros-, 2195
viene, y se oye que en festivo aplauso dicen los ecos.
ELLA y MÚSICA Venid, mortales, venid, al triunfo mayor,
al aplauso más nuevo 2200
que gloriosa la fe ha conseguido corriendo los días,
volando los tiempos. Venid, venid a mi acento.
BEHOMUD Salgamos a recibirla. 2205
(Dale el estandarte y vanse acercando a la puerta por donde todos vienen.)
FILIPO Toma tú antes el supremo estandarte de la fe,
que ha de ir delante del leño sacrosanto de la cruz
de la esperanza.
BEHOMUD Agradezco 2210
por el más supremo honor este de cuantos poseo.
CANDACES Pues llega ya, con sus voces repitan nuestros acentos.
ELLA y MÚSICA Venid, mortales, venid, 2215
al triunfo mayor,
al aplauso más nuevo
que gloriosa la fe ha conseguido corriendo los días,
volando los tiempos. 2220
Venid, venid a mi acento.
(Con esta repetición, al son de chirimías, salen el ÁNGEL delante con la vara, con la cruz de la Santa Inquisición, y en un carro que vienen tirando el Gentilismo, el Hebraísmo, el DEMONIO y la PITONISA, la FE, que trae una cruz cubierta con un velo negro, y en descubriéndola a su tiempo, se verá por remate un cáliz y una hostia, y entre todos el DESCUIDO.)
CANDACES Salve, bello resplandor. BEHOMUD Salve, ilustrado reflejo. FILIPO Salve, puerta de la gloria.
LOS TRES Y celebren tus misterios 2225
la tierra con flores, con luces el cielo.
MÚSICA La tierra con flores, con luces el cielo.
CANDACES Salve, centro de la ley. 2230
BEHOMUD Salve, universal remedio.
FILIPO Salve, origen de la luz.
LOS TRES Y celebren tus misterios
la luna con giros,
el sol con luceros. 2235
MÚSICA La luna con giros el sol con luceros.
DEMONIO ¡Que esto mi soberbia sufra!
PITONISA ¡Que mi rabia sufra esto!
HEBREO ¡Que en tal deshonor me vea! 2240
GENTIL Yo lo erré; ya lo confieso.
DESCUIDO ¿Creerán que hasta de la causa
por que aquí estoy no me acuerdo?
FE Nada dilate este triunfo
en que mis contrarios venzo. 2245
BEHOMUD Toma tu sitial, señora.
CANDACES Que es este el más propio creo,
a vista de deidad donde es sacrificio el respeto.
DEMONIO ¡De ira rabio!
PITONISA ¡De ansia gimo! 2250
HEBREO En mi dictamen primero constante moriré.
GENTIL Solo haber delinquido siento.
CANDACES ¿A qué aguardáis?
FILIPO A que hagas
el preciso juramento 2255
en el libro de la ley
y en el sagrado madero de la cruz.
CANDACES Pues ¿a qué esperas?
FILIPO (Pónele un misal y una cruz a la Reina para hacer el juramento.)
¿Juráis que en todos los tiempos,
como Católica Reina 2260
defenderéis el derecho de la Religión Cristiana,
arrojando y persiguiendo a todos sus enemigos?
CANDACES Así lo juro, y prometo 2265
por mi fe y palabra real.
FILIPO Seréis dichosa con eso, y dilatará el Señor
vuestra progenie al respecto
de las arenas del mar, 2270
de las estrellas del cielo.
(Pónense los delincuentes a un lado todos, y los van relatando como se siguen.)
FE Empezad.
ÁNGEL La Pitonisa es esta,
que en hechiceros encantos,
supersticiosos conjuros, pacto teniendo, 2275
violentaba el albedrío.
PITONISA Sí lo hice, y no me arrepiento.
FE Con pública afrenta pague
su delito; echadla al fuego.
FILIPO Éste el Lucero enemigo 2280
es, que sembró en el terreno de aquel trigo misterioso
la cizaña, que creciendo
fue hasta que el Padre Divino
de familias, reduciendo 2285
su malicia, en hacecillos, llegó a entregarlos al fuego; es el que con piel de lobo matar intentó el cordero
preparado al sacrificio. 2290
DEMONIO Sí lo hice; y no me arrepiento.
FE De su desesperación
le arrojen en el incendio.
ÁNGEL Éste el Hebraísmo es,
que ingrato, traidor, protervo, 2295
adulterando el sentido
del cómputo de los tiempos de Daniel, quitó la vida
a su Dios, no conociendo
que el prometido Mesías 2300
era, que a salvar el pueblo bajó del seno del Padre.
HEBREO Es verdad, no me arrepiento;
y si mil vidas tuviera, mil vidas...
FE Calla, blasfemo; 2305
ponedle dura mordaza, y por relapso y protervo
muera en la pública llama, con general perdimiento
de sus bienes y heredades. 2310
FILIPO El Gentilismo, que ciego adoró deidades falsas,
desangrando y consumiendo en sus ídolos las minas
de oro, plata, cobre y hierro, 2315
este delincuente es.
GENTIL Verdad es; mas me arrepiento, y lloro mi ceguedad,
para cuya prueba alego
que cuando sin vista fui 2320
con aquel errado fresno, a herir de aquel inocente
Dios y Hombre el helado cuerpo, restituido a mi vista
exclamó mi voz, diciendo: 2325
«Hijo de Dios era este»
lo cual afirmo y confieso.
FE Admitido en la ley nueva quede, y con el privilegio
de que la viña y esotras 2330
heredades que al hebreo confiscaron se le apliquen.
DEMONIO y PITONISA ¡Hay tal rabia!
HEBREO ¡Hay tal tormento!
ÁNGEL Éste es el Descuido humano,
que por errores ligeros 2335
se presenta.
DESCUIDO Pues de cuantos me acordare, me arrepiento.
FE Jure «de levi».
DESCUIDO Sí haré
pero acuérdelo a su tiempo.
FE ¿Falta alguien?
ÁNGEL y FILIPO Ninguno falta. 2340
CANDACES, Pues a tan grande portento
FILIPO y repitan las consonancias
BEHOMUD
en agradecidos ecos.
MÚSICA Venid, mortales, venid,
al triunfo mayor, 2345
al aplauso más nuevo
que gloriosa la fe ha conseguido corriendo los días,
volando los tiempos.
Venid, venid a mi acento. 2350
FE Pues ya se ve concluido acto tan grande
y supremo para que en todo le imite
al que en los futuros tiempos
ha de celebrar la fe 2355
del monarca más excelso,
cumplidas las ceremonias,
a la más precisa atiendo,
corriendo el velo a la cruz.
(Corre el velo a la cruz.)
FILIPO Cuyo sagrado madero 2360
ara fue donde ofreció
la vida el manso cordero, habiendo dejado antes sacramentado su cuerpo
en la noche de la cena 2365
para universal remedio.
FE Que en esta hostia, este cáliz,
nos da su Sangre y su Cuerpo,
milagro de los milagros,
misterio de los misterios. 2370
FILIPO Pues que de la fe instruidos sois, y en el conocimiento, de que aquel cordero manso que tú con devoto celo
(A CANDACES.)
a Jerusalén enviabas, 2375
y el que tú hallaste leyendo
(A BEHOMUD.)
al gran profeta Isaías,
de la hostia que estás viendo, fueron imagen, rendidos
a tan alto sacramento, 2380
digamos.
CANDACES ¡Felice suerte!
BEHOMUD ¡Qué alegría!
GENTIL ¡Qué contento!
PITONISA ¡Qué horror!
DEMONIO ¡Qué muerte!
HEBREO ¡Qué rabia!
FILIPO Humildes a sus pies puestos.
TODOS y Venid, mortales, venid 2385
MÚSICA al triunfo mayor,
al aplauso más nuevo
que gloriosa la fe ha conseguido, corriendo los días,
volando los tiempos, 2390
y celebren sus misterios la tierra con flores,
con luces el cielo la luna con giros,
el sol con luceros. 2395
(Tocan chirimías, y cerrándose los carros, se da fin al auto.)
El cordero de Isaías-Caldeón de la Barca - Pedro Calderón de la Barca