Presbíteros /Santo Padre /Encíclicas
Ad catholici sacerdotii
20/12/1935
Desde que, por ocultos designios de la divina Providencia, Nos vimos elevados a este supremo
grado del sacerdocio católico, nunca hemos dejado de dirigir Nuestros más solícitos y
afectuosos cuidados, entre los innumerables hijos que Nos ha dado Dios, a aquellos que,
condecorados con el carácter sacerdotal, tienen la misión de ser la sal de la tierra y la luz del
mundo.